Thanks for the Feedback - Douglas Stone, Sheila Heen

Thanks for the Feedback - Douglas Stone, Sheila Heen

Entiende la importancia de los feedbacks para las relaciones interpersonales y aprende a recibirlos y convertirlos en aprendizaje.

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La gente tiene la tendencia a elogiar y criticar, es normal. Todo depende de cómo manejes la visión que la gente tiene de ti, y de eso trata el libro "Thanks for the Feedback", de Douglas Stone y Sheila Heen.

¿Te han dicho alguna vez lo bien que estás hoy? ¿O lo totalmente inaceptable que fue la forma en que manejaste un problema? ¿O incluso te ha guiado para conseguir un resultado diferente al que imaginabas?

Todos los días recibimos muchos feedbacks, tanto positivos como negativos, porque estamos sometidos a una evaluación constante y a juicios, y esto es inevitable. Sin embargo, podemos cambiar nuestra interpretación y transformarla en aprendizaje.

¿Quieres saber cómo? Entonces, ¡ven con nosotros!

Sobre la obra "Thanks for the Feedback"

Con un lenguaje inteligente y humorístico, los autores Douglas Stone y Sheila Heen nos preparan para sentarnos frente al jefe, el esposo, la esposa, los padres y mejorar con cada buena y mala retroalimentación con el libro "Thanks for the Feedback", publicado en 2014.

Sobre los autores Douglas Stone y Sheila Heen

Tanto Douglas Stone como Sheila Heen son fundadores de Triad Consulting Group y profesores de la Facultad de Derecho de Harvard. Entre sus clientes se encuentran HSBC, el Banco de la Reserva Federal, Unilever e instituciones públicas como la Casa Blanca.

Doug, como se le llama cariñosamente en su sitio web, lleva 22 años en Harvard Negotiation Project, trabajando e investigando sobre las teorías de la negociación.

Sheila, por su parte, lleva 20 años en el proyecto, especializada en negociaciones difíciles, aquellas en las que las emociones están a flor de piel y las relaciones están comprometidas.

Ambos escribieron también el bestseller "Conversaciones Difíciles", que les valió apariciones en programas de televisión, como el de la famosa Oprah Winfrey.

¿Este libro es recomendado para quién?

Al estar centrado en la persona que recibe la retroalimentación, el libro "Thanks for the Feedback" es adecuado para todos aquellos que han experimentado evaluaciones de rendimiento en el trabajo, o han recibido ese consejo de la suegra sobre cómo educar a los hijos, o incluso han recibido un sermón de la policía.

Además, se recomienda para las personas que necesitan constantemente dar retroalimentación y quieren sentirse en el otro lado para mejorar sus habilidades.

Ideas principales del libro "Thanks for the Feedback"

Douglas Stone y Sheila Heen aportan varias ideas interesantes para todos los receptores de feedbacks:

  • Qué es la retroalimentación y cómo influye en nuestras emociones;
  • Cómo lidiar con los desencadenantes de la verdad, los desencadenantes de las relaciones y los desencadenantes de la identidad;
  • Podemos ignorar los feedbacks que no nos agregan nada.

¿Tienes curiosidad por crecer a través de las críticas sin sentirte abrumado? ¡Vamos!

El desafío del feedback

Comencemos este resumen del libro "Thanks for the Feedback" explicando qué es la retroalimentación. Según los autores Douglas Stone y Sheila Heen:

"El feedback es cualquier información que recibes sobre ti mismo."

Puede ser positivo o negativo, totalmente insensible e ingrato, pero también esclarecedor y edificante. A veces ni siquiera nos damos cuenta de que ha ocurrido.

Recibir bien el feedback es una habilidad que se puede adquirir. Y no es lo mismo que aceptar todo lo que te dicen. Incluso en ese momento, necesitamos filtros.

Nuestras reacciones a las retroalimentaciones están dirigidas por 3 tipos de desencadenantes:

  1. Desencadenantes de la verdad: activados por el contenido de una retroalimentación poco útil. Por lo general, los sentimientos desencadenados son la indignación, la ofensa y la irritabilidad;
  2. Desencadenantes de las relaciones: atenuados por la relación con la persona que da el feedback. Aquí nos centramos en el descaro de la persona que lo da;
  3. Desencadenantes de la identidad: cuando la percepción de lo que somos se altera. Podemos sentirnos avergonzados y cuestionar nuestra forma de ser.

Estos gatillos son obstáculos para nuestra participación positiva. Impiden que crezcamos y que crezca la relación con la persona que da el feedback.

La dificultad de ver

Lo primero que debemos saber sobre el contenido del feedback es que hay tres tipos: reconocimiento, orientación y evaluación. Todos ellos son diferentes y, por tanto, las emociones y las formas de afrontarlos son diferentes.

  1. Reconocimiento: ser visto y comprendido, es decir, ser reconocido, es esencial. Esta necesidad se percibe muy fácilmente en los niños, pero no se supera cuando nos hacemos adultos;
  2. Orientación: se produce en aquellos momentos en los que necesitamos un reconocimiento diferente, es decir, que la persona que nos ha reconocido previamente nos oriente. De este modo, podemos sentirnos animados a dar siempre lo mejor de nosotros mismos;
  3. Evaluación: por último, está la evaluación, es decir, el clásico feedback, que se produce cuando la persona expresa exactamente su situación en relación con algo. Este tipo es más claro y se percibe fácilmente en sus matices positivos y negativos.

Douglas Stone y Sheila Heen señalan que nos impulsamos por esto último, y que el silencio de la falta de evaluación pueden generar una falta de autoconfianza, mientras que la falta de reconocimiento puede dejar un enorme vacío en cualquier relación.

La falta de orientación, por otra parte, puede ser peligrosa y dejar a todos confundidos, con baja productividad, baja afectividad y baja moral.

El libro "Thanks for the Feedback" da consejos para alejar el reconocimiento de los otros dos tipos, ya que la gente suele necesitarlo más y se siente ofendida si se le reconoce con un "pero...".

Tienes que comprender de dónde viene esa retroalimentación, los datos que llevaron a la persona a decir esas críticas y la interpretación vista a través de los ojos del interlocutor. Y también hacia dónde va, es decir, hacia ti, el oyente.

¿Te has preguntado alguna vez si la persona que te critica entiende todo lo que has hecho y todo lo que has pasado para estar donde estás ahora? ¿Te has preguntado alguna vez si conoces la verdadera preocupación del orador y por qué la acción es tan importante?

Si no te abstienes de hacer preguntas a la persona que te critica, como "¿cuál es la verdadera razón por la que este comportamiento puede crear problemas?", la retroalimentación será mucho más efectiva y feliz.

Es necesario reconocer que tenemos puntos ciegos. ¡Incluido tú! ¡Eso es! Tienes puntos ciegos como todos los demás en el mundo.

¿Has notado alguna vez que no puedes ver tu propia cara? ¿O que no reconoces el tono de tu voz? Incluso tus comportamientos más absurdos y rebuscados pasan desapercibidos por nadie más que por ti mismo.

Lo más probable es que alguien haya dicho ya: "¿Estás enfadado?" Y lo único que te has dado cuenta es que estabas intentando concentrarte en algo difícil. Esa es la matemática emocional, como muestran los autores Douglas Stone y Sheila Heen.

Tendemos a aumentar los sentimientos de la gente y a disminuir los nuestros. Lo que crea un gran malentendido cuando necesitamos tener la famosa empatía, ¿no es así?

Otra cosa que siempre ocurre, como se presenta en la obra "Thanks for the Feedback", es que atribuimos nuestros defectos a las situaciones y los de la otra persona a su carácter. Y creemos que nuestras intenciones son suficientes, pero las de los demás no lo son. Es curioso, ¿verdad? Estos son nuestros puntos ciegos.

Para poder verlos, necesitamos la ayuda de la gente, necesitamos que sean sinceros y, por supuesto, necesitamos que nos den su opinión.

El desafío del "nosotros"

El gran problema cuando dialogamos es que somos dos personas que no leen la mente. No sabemos lo que la otra persona está tratando de decir realmente, al igual que ella no sabe lo que sentimos al respecto.

Esto puede crear cierta irritación dentro de una relación cuando recibimos un feedback. Esto es totalmente normal. Pero hay que pensar si la persona tiene credibilidad y fiabilidad en el tema y en nuestra vida.

Además, "¿cómo me siento cuando recibo estos comentarios?" Según el libro "Thanks for the Feedback", tenemos que reconocerlo para poder absorber y dirigir la conversación en consecuencia.

Es muy común que se produzcan desviaciones. ¿Quién no ha discutido alguna vez sobre algo con alguien y al final ambos decían lo mismo de forma diferente? Cuidado, podría ser que fueran cosas distintas.

En este caso, reconoce la desviación e intenta exponer al otro las dos formas de pensar, llegando a un consenso.

También hay momentos en los que decimos:

"Es una persona difícil, ¿no?"

Estas personas pueden ver nuestras peores debilidades y aprovecharlas de una manera que otra persona "fácil" no haría.

Los autores Douglas Stone y Sheila Heen presentan una técnica para facilitar la comprensión del feedback recibido, dando tres pasos atrás:

  1. Un paso atrás: "¿Las diferencias entre nosotros crean fricciones?";
  2. Dos pasos atrás: "¿Es esto, en parte, resultado de los roles que desempeñamos en la organización o en la familia?";
  3. Tres pasos atrás: "¿Los procesos, las políticas, el entorno físico u otros factores intensifican el problema?"

Al hacer esto, comprenderás mejor el sistema que dio lugar a esa retroalimentación, reduciendo el juicio y aumentando la responsabilidad de ambas partes, e incluso puede revelar las causas subyacentes detrás de las críticas.

El desafío del "yo"

En esta parte del resumen del libro "Thanks for the Feedback", vamos a acercarnos un poco más al peligro. El desencadenante de la identidad deja una retroalimentación peligrosa, ya que plantea cuestiones problemáticas de tu relación contigo mismo.

Reaccionamos de formas totalmente diferentes a las retroalimentaciones, y la forma en que nuestra red neuronal responde a esto es lo que los autores llaman un circuito.

En este circuito, poseemos la línea de base, que es la forma en que nos vemos antes de la retroalimentación. Si tienes una visión de ti mismo haciendo un mal trabajo, por ejemplo, cualquier comentario positivo te levanta, pero los comentarios negativos hacen más daño.

La oscilación, en cambio, puede variar de una persona a otra. Algunos, incluso con una línea de base más alta, sienten más aspectos negativos que positivos.

Al final, tenemos nuestra línea de base, y la oscilación que puede darse en torno a ella. Además, tenemos el tiempo que dura cada pico de oscilación, llamado recuperación.

No te emociones tratando de medir todo esto. Un investigador ya ha revelado que todo esto puede variar hasta un 3000% entre personas.

"Las emociones distorsionan nuestra percepción del feedback."

Sé siempre consciente de los feedbacks que recibes. Debes darte cuenta de que no puedes controlar lo que el mundo piensa de ti.

Y aquí viene la buena noticia: todo lo que la gente dice de ti es información y nunca serán conclusiones.

Para Douglas Stone y Sheila Heen, la forma en que contamos nuestra historia influye en la manera en que recibimos y asimilamos la información. Por eso, mantén la complejidad de las cosas que has vivido y tus sentimientos.

Cambia tu mentalidad hacia el crecimiento, así, aunque recibas una mala crítica, podrás superarla y sacar conocimiento de ella.

Feedback en la conversación

Por fin, los autores Douglas Stone y Sheila Heen muestran, en la obra "Thanks for the Feedback", que debe haber un límite para la aceptación de los feedbacks. Todo el mundo necesita límites, aunque sean momentáneos.

Para hacer esto, existen tres tipos de límites y consejos para desvincularte de las personas que no los respetan:

  1. "No, gracias: me alegra escuchar tu consejo... y puede que no lo siga";
  2. "Ahora no, en este tema no - necesito tiempo o espacio, o este es un tema muy delicado para mí en este momento";
  3. "Sin feedback: Nuestra relación depende de tu capacidad de mantener tus juicios para ti mismo."

Siempre tienes que ser explícito sobre lo que pides, mostrando el momento por el que pasas; y cuáles son las consecuencias para la relación, llegando al consentimiento.

¿Qué dicen otros autores al respecto?

Para Marcus Buckingham y Donald Clifton, autores del libro "Ahora, Descubra sus Fortalezas", para aumentar la productividad, el secreto es centrarse en los puntos fuertes de los empleados en lugar de tratar de mejorar las debilidades.

En el libro "Mindset", la psicóloga Carol Dweck analiza cómo nuestras creencias moldean nuestro comportamiento y nuestro crecimiento. Mientras que los mindsets producen visiones de mundo definitivas, las personas pueden cambiar al aprender nuevas habilidades. Se puede enseñar a los seres humanos a reaccionar de forma diferente, a afrontar los desafíos y a pensar de manera distinta.

En el libro "Cómo Ganar Amigos e Influir Sobre las Personas", Dale Carnegie también habla de los elogios como una forma de influir: una de las características más fuertes del comportamiento humano es el deseo de ser valorado por otras personas; a todos nos gusta recibir elogios y escuchar que estamos haciendo un buen trabajo.

Cierto, pero ¿cómo puedo aplicar esto en mi vida?

Casi todo el libro "Thanks for the Feedback" habla de lo que puede hacer la persona que recibe la retroalimentación para entender lo que está pasando y sentirse mejor y más cómoda para crecer.

Los autores Douglas Stone y Sheila Heen ofrecen algunos consejos para las personas que se ocupan de la retroalimentación en las organizaciones y quieren optimizar sus resultados:

  • Liderazgo y recursos humanos: no te limites a anunciar los beneficios, explica el dilema de la evaluación del rendimiento. No confundas el reconocimiento con la orientación o la evaluación y promueve una cultura de aprendizaje;
  • Líderes de equipo y emisores de feedback: sé siempre el ejemplo a seguir, porque cuando des feedback, no serás desacreditado. Gestiona tu identidad y tu mentalidad, dar feedback sin confianza en ti mismo puede hacer tambalear las estructuras del receptor.

"Sea cual sea el contexto o la empresa, tú eres la persona más importante en tu propio aprendizaje. Tu compañía, tu equipo y tus superiores pueden ofrecerte o negarte el feedback. Aun así, nadie es capaz de impedir que aprendas."

¿Te gustó este resumen del libro "Thanks for the Feedback"?

¡Esperamos que puedas aplicar los consejos de Douglas Stone y Sheila Heen en tu vida! Deja tu opinión en los comentarios, ¡tu feedback es muy importante para nosotros!

Además, para saber más sobre el contenido, compra el libro haciendo clic en la siguiente imagen:

Libro “Thanks for the Feedback”